martes, 29 de enero de 2008

Nuestro secreto


Hoy fui al cine a ver una película de la que definitivamente esperaba mucho más: "Nuestro secreto", con David Duchovny (el actor de "Los Expedientes Secretos X"). La verdad es que cuando elegí la película, no sabía muy bien de qué se trataba, pero me pareció que si tenía al actor que hizo de una serie tan mala (con todo respeto) algo exitoso, al menos las actuaciones serían decentes.

La película narra la historia de un hombre, Ben cuya relación con su esposa Hannah es digna de un cuento de hadas, y tienen una hija de aproximadamente 17 años, Sam con la que no establecen mucha comunicación. Un buen día Hannah y Sam tienen un accidente en donde la señora muere y la chica queda en coma. Cuando Sam despierta, tiene la personalidad de su madre...es como si el espíritu de la señora se hubiera transportado al de la chica, pero la pregunta es ¿Dónde está el de la chica?

La verdad es que la trama de la película me resultó un poco enfermiza y mal desarrollada si partimos de algunos principios básicos de dramaturgia que plantea Lavandier. La historia no es muy novedosa, me parece una versión dramática de "Freaky Friday", la película de Lindsay Lohan en la que por un hechizo extraño, su madre y ella intercambian cuerpos. Sobra decir que, como en "Nuestro secreto", la relación madre e hija está muy deteriorada y la experiencia les ayuda a comprenderse mejor.

En segundo lugar, resulta un poco incómodo ver una historia como esta en la que Ben, el padre, lucha contra la incredulidad a la vez que lucha contra los deseos de estar con su mujer. Sería demasiado pensar que en algún momento algún tipo de gesto amoroso se de entre ellos, porque aunque la historia está pensada para que el espectador sienta que la niña es en verdad la madre, no podemos dejar a un lado que se trata de una chica de 17 años que además, en términos reales y físicos, es la hija del protagonista.

En términos narrativos, la historia tampoco es buena. Muchos personajes se quedan inconclusos y su participación es irrelevante. Un ejemplo de esto es Tara, la consejera escolar de Sam, cuya única participación en la película tiene el objetivo de darle celos a la esposa de Ben, que ya está encarnada en la jovencita; parecería que este personaje sería el punto de giro en la relación perfecta de los esposos, pero sólo se queda en una escena que no cambia en nada la situación. Decía mi maestro de Creatividad Literaria en España: En toda historia, si se pone un clavo en la pared, se tiene que colgar un cuadro. Con esto se refería a que todo lo que pase en una historia y todos los personajes deben tener un por qué y un desenlace...sigo esperando a que Tara cuelgue su cuadro. 

Como Tara, hay muchos otros personajes (las amigas de Hannah, Justin que es el novio de Sam, etcétera.) Pero desde mi punto de vista, lo más decepcionante además de lo inconcluso de todos los personajes y de la historia global, es la actuación de Duchovny, que en ciertos momentos no le deja claro al espectador si le cree o no a su hija/esposa, y que ni para llorar es bueno, porque en la escena de la muerte de su mujer, se limita a recargarse contra la pared y a fruncir un poco el ceño, aunque la verdad no hay muchos cambios en su expresión. La actuación de Sam es muy buena, logra definir muy bien sus dos personalidades, la de jovencita rebelde y la de mujer casada. 

No sé qué piensan ustedes pero ojalá que puedan darme su opinión sobre esta película porque la verdad me dejó bastante decepcionada.

1 comentario:

Unknown dijo...

A mi me pareció una película un tanto... como describirla... a parte de mala y patética, medio freaky porque en verdad hay escenas en las que da hasta un poco de repulsión ver al padre "seduciendo" a su hija/esposa. La verdad esperaba algo mucho mejor, comparto tu opinión.