miércoles, 27 de febrero de 2008

Eastern Promises


EL LADO HUMANO DE LA MAFIA

El cine le da al espectador perspectivas distintas de un mismo hecho. Eastern Promises de Cronenberg recuerda que incluso los mafiosos, asesinos llenos de ambición, tienen algo en común con todos nosotros: son seres humanos.

LEALTADES CONTRA SENTIMIENTOS
Protagonizada por los nominados al Oscar, Viggo Mortensen y Naomi Watts, Eastern Promises sumerge al espectador en las profundas redes de la mafia, y muestra el lado más trágico y oscuro de quienes se desenvuelven en ella.

La historia se desarrolla en Londres. Nikolai Luzhin (Mortensen) es el chofer de una de las familias más importantes de la mafia rusa, perteneciente a la hermandad Vory V Zakone. Sus intereses y su lado criminal se ven cuestionados cuando conoce a Anna Khitrova (Watts), una enfermera y madre frustrada que busca incesantemente a los familiares de la hija de una adolescente que murió al dar a luz, y cuyo único documento de identidad es un diario escrito en ruso.

Con la ayuda de su tío Stepan (Jerzy Skolimowski), Anna traduce el diario y descubre un aterrador secreto que puede destruir a Semyon (Armin Mueller – Stahl), la cabeza de la familia a la que Nikolai sirve. Anna y su familia se ven peligrosamente involucrados con la mafia. El chofer deberá decidir entre seguir sus sentimientos por ella o ser fiel a la familia que le ha dado todo lo que tiene.

EL TOQUE CRONENBERG
Para la hermandad mafiosa Vory V Zakone, el cuerpo no es sólo el vehículo del alma, sino también una hoja en blanco, perfecta para contar historias personales. Una vez más, el director canadiense David Cronenberg recurre a la complejidad psicológica y rinde culto al cuerpo humano con una historia en la que los tatuajes de un hombre representan su pasado y determinan su futuro. El cuerpo deja de ser un arma para convertirse en un lienzo de vivencias . Sin embargo, Cronenberg deja a un lado la brutalidad de Extraños placeres (1996) y el sensacionalismo furioso de Spider (2002), para dar paso a un nuevo concepto de hombre, dotado de sentimientos que lo convierten en incierto y endeble.

El surrealismo y la alegoría que caracterizaron algunas películas de Cronenberg como Videodrome (1983) o Naked Lunch (1991) han derivado en un género más cercano a la realidad. En esta historia, escrita por Steve Knight y producida por Paul Webster y Robert Lantos, las emociones cobran importancia, pero no por eso desaparecen los puntos de giro que ponen en duda las intenciones de los personajes. Al igual que en Una historia violenta (2005), los protagonistas cambian abruptamente de roles y muestran al espectador su indefinida y polarizada personalidad; pero lo que hace de esta película una historia diferente es el constante debate social y personal sobre cuál posición es más conveniente adoptar, la del bien o la del mal.

1 comentario:

PuLPo dijo...

esto se parece más a una reseña que a una opinión, hay que trabajar más con esto...